El aumento de la abundancia de desechos plásticos ha alarmado a la sociedad, el destino ambiental de los microplásticos ha sido difícil de rastrear. Un grupo de investigación utilizó el etiquetado de isótopos de carbono para seguir el destino del polietileno en la cadena alimentaria. Para sorpresa de los investigadores, el carbono plástico fuetransformado en ácidos grasos beneficiosos, omega-3 y omega-6, por los microbios procedentes de lagos húmicos.
En el estudio publicado recientemente, el Dr. Sami Taipale y sus colegas estudiaron la biodegradación del polietileno, que es uno de los plásticos más utilizados. El polietileno fue etiquetado con 13C-isótopo, que permite la tecnología más sensible para estudiar el destino demateriales que se degradan lentamente.
"Analizamos los gases producidos y los ácidos grasos microbianos mediante espectrometría de masas de isótopos estables", dice Taipale, quien acaba de recibir un proyecto de 4 años de la Fundación Kone para continuar sus estudios sobre la degradación microplástica.
"Queríamos estudiar si los microbios que tienen la capacidad de descomponer compuestos húmicos complejos también usarían polímeros microplásticos recalcitrantes, continúa Taipale. -Y de hecho, la degradación microplástica fue más pronunciada por los microbios que se originan en los lagos húmicos que en los lagos de agua clara.
"Los perfiles de ácidos grasos también ayudaron a identificar los grupos bacterianos responsables de la descomposición", dice la coautora, la profesora Marja Tiirola, quien lidera un nuevo proyecto de la Academia de Finlandia para descubrir descomponedores de materiales recalcitrantes.
"La falta de material etiquetado limita los estudios de microplásticos, por lo que invitamos a los socios a sintetizar otros tipos de plástico etiquetado"
La utilización directa de polietileno de carbono y su mejora en la cadena alimentaria superior es un avance metodológico. El método fue lo suficientemente sensible como para mostrar que el carbono microplástico se incorporó en ácidos grasos esenciales, omega-3 y omega-6, de especies eucariotas flageladasEn el estudio posterior, estos ácidos grasos esenciales apoyaron el crecimiento y se integraron a las membranas celulares del zooplancton herbívoro, el siguiente nivel en la cadena alimentaria acuática.
Estudios anteriores han sugerido que altas concentraciones de microplásticos pueden inhibir el crecimiento de algas y zooplancton. Sin embargo, este estudio demostró que la inhibición del crecimiento observada en altas concentraciones de polietileno 30 mg L-1 fue completamente neutralizada por los descomponedores microbianos.
"La superficie plástica estaba cubierta por microbios, que utilizaban químicos liberados o evitaban el contacto físico con las algas y el zooplancton", dice uno de los coautores, el profesor Jussi Kukkonen, especializado en ecotoxicología. Dado que los microbios pueden cesar la toxicidad potencial de los microplásticos en el medio acuáticoentornos, las pruebas ecorrealistas deben realizarse en presencia de microbiomas naturales.
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Materiales proporcionado por Universidad de Jyväskylä - Jyväskylän yliopisto . Nota: El contenido puede ser editado por estilo y longitud.
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