Durante más de un mes en 2015, un equipo multidisciplinario que incluía médicos y enfermeras de enfermedades infecciosas y de cuidados intensivos, terapeutas respiratorios y otros especialistas de los Institutos Nacionales de Salud NIH trató a un paciente grave que había contraído la enfermedad por el virus del Ébola en SierraLeone. Un nuevo informe de los cuidadores médicos detalla el curso clínico del trabajador de la salud estadounidense de 34 años que fue admitido en la Unidad de Estudios Clínicos Especiales de los NIH el día 7 de su enfermedad. El paciente sobrevivió a su enfermedad con cuidados intensivos de apoyo,a pesar de la insuficiencia multiorgánica.
Al ser admitido en el Centro Clínico de los NIH, el paciente se inscribió en un ensayo clínico y se asignó al azar para recibir únicamente atención de apoyo optimizada. El otro brazo del ensayo incluía tratamiento con terapias experimentales. En los primeros días después de la admisión, el estado del pacienteempeoró dramáticamente y experimentó insuficiencia orgánica secuencial, a pesar de los cuidados de apoyo intensivos que incluían el mantenimiento de un equilibrio óptimo de líquidos y electrolitos. Su pronóstico era malo.
Además de la disminución de la función renal y hepática, el paciente experimentó una debilidad neuromuscular grave que provocó insuficiencia respiratoria y requirió ventilación mecánica durante 10 días. Las complicaciones también incluyeron meningoencefalitis, una afección frecuentemente fatal que involucra inflamación del cerebro y el tejido meníngeo., las capas externas protectoras del cerebro y la columna vertebral. El día 33 de la enfermedad del paciente, cuando ya no estaba excretando el virus, los médicos realizaron exploraciones por resonancia magnética IRM y detectaron múltiples sitios de daño tisular lesiones tanto en elcerebro y columna vertebral, en consonancia con las múltiples anomalías del sistema nervioso experimentadas por el paciente durante su enfermedad. La meningoencefalitis se describió anteriormente como una complicación de la infección por el virus del Ébola, pero, según señalan los médicos de los NIH, el nuevo informe es el primero en incluir hallazgos de resonancia magnéticay un examen físico detallado de un paciente que solo recibió atención de apoyo.
Al final, el paciente sobrevivió a su enfermedad. Cuando se le examinó 7 meses después de su ingreso en el hospital, casi todas sus anomalías neurológicas habían desaparecido y las resonancias magnéticas mostraron que la mayoría de las lesiones observadas anteriormente se habían resuelto. Este informe destaca que puede ocurrir una falla orgánica secuencialen pacientes con enfermedad grave por el virus del Ébola a pesar de la atención meticulosa a los equilibrios de líquidos y electrolitos, y que es posible una recuperación casi completa solo con cuidados de apoyo intensivos.
Los institutos de los NIH que contribuyeron al informe fueron el Centro Clínico de los NIH; el Instituto Nacional del Ojo; el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre; el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas; y el Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares.
Fuente de la historia :
Materiales proporcionado por NIH / Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas . Nota: el contenido se puede editar por estilo y longitud.
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