La deforestación se ve a menudo como el principal enemigo de la selva amazónica. Sin embargo, un estudio reciente muestra evidencia de una amenaza aún más inminente: el cambio climático. Los investigadores temen que, si se demuestra que los escenarios climáticos son correctos, un cambio permanente en elel oeste de Amazon puede comenzar a tener lugar dentro de 10 años. Su artículo fue publicado en Cartas de investigación geofísica. En 2005, la selva amazónica experimentó una fuerte sequía, considerada por los expertos como la peor en 100 años. A este evento le siguió una sequía aún más severa en 2010, que generó la luz roja entre científicos y ambientalistas. Los impactos de estos eventos hanse ha discutido ampliamente, pero aún falta una comprensión completa de las consecuencias.
Ahora, un nuevo estudio dirigido por el investigador Eduardo Maeda de la Universidad de Helsinki ha reunido una combinación única de datos satelitales y mediciones hidrológicas para estudiar el problema. Los resultados son motivo de preocupación.
"Lo que vemos es que si bien algunas áreas de la selva amazónica parecen ser resistentes a estos eventos climáticos extremos, otras áreas grandes muestran un equilibrio frágil. El problema es que cuando este equilibrio se rompe, los impactos para el sistema hidrológico yla vegetación parece ser bastante persistente, ya que el sistema tarda de 3 a 4 años en recuperarse ", dice Eduardo Maeda.
Este tipo de interrupción parece desencadenarse solo por eventos extremos raros, que ocurren en promedio cada 20 años o más. Este intervalo, en teoría, sería suficiente para permitir una recuperación completa de los patrones hidrológicos y la vegetación. Pero el climaLos científicos no son tan optimistas. Estudios anteriores han demostrado que el cambio climático puede aumentar la frecuencia de sequías como la que ocurrió en 2005.
"Las simulaciones de modelos de estudios previos de otros grupos indican que, para 2025, la frecuencia de estos eventos podría ser tan alta como 1 cada 2 años", dice.
Si se confirman estos escenarios climáticos, el estudio realizado por Maeda y sus colaboradores indica que el sistema hidroecológico ya no tendría tiempo para recuperarse. Esto llevaría a graves consecuencias para un área forestal casi 2 veces más grande que Suiza, causando una mortalidad masiva de árbolesy cambiar permanentemente la cara del oeste de la Amazonía.
El estudio fue financiado por la Academia de Finlandia y contó con la colaboración de investigadores de la Universidad de Tokio, el Instituto Nacional de Investigación Espacial de Brasil, NASA-JPL y la Universidad de California.
Fuente de la historia :
Materiales proporcionado por \ Universidad de Helsinki . Nota: El contenido puede ser editado por estilo y longitud.
Referencia del diario :
Cite esta página :